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VISIBLEMENTE AFECTADA luego de conocer el veredicto de culpabilidad contra su esposo, Emma Coronel declaró: "No voy a llorar, nadie se ha muerto".
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Nueva York. USA. Especial. Luego de tres meses de un prolongado juicio y 35 horas de deliberaciones repartidas en seis días los 12 integrantes de un jurado encontraron culpable a Joaquín Archibaldo Guzmán Loera de diez delitos de tráfico de cocaína, heroína, metanfetaminas y mariguana a los Estados Unidos, así como uso de armas de fuego y lavado de dinero.
Fue a las 12.30 horas del martes 12 de febrero cuando el juez Brian Cogan leyó el veredicto de culpabilidad contra el capo, el que lo declaró también culpable de 25 de las 27 violaciones de las que era acusado, incluída conspiración para asesinar en el contexto del narcotráfico.
Ahora resta esperar la sentencia del juez neoyorquino, prevista para el 25 de junio y que solo puede ser de cadena perpetua, todo apunta a que el capo sea enviado a la prisión de máxima seguridad en Florence, Colorado conocida también como ADX o Super Max.
La DEA y el FBI celebraron el veredicto como un hecho histórico y lo consideraron como una victoria para el pueblo de los EU.
Para el último día de su juicio, y quizá el último que vista de civil El Chapo visitió un traje de
color azul marino, camisa clara de tono azulado y corbata negra.
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| EN CADA una de las audiencias de su prolongado juicio "El Chapo" Guzmán siempre vistió de traje. |
A las 12.15 horas el juez Brian Cogan ingresó a la sala, saludo a las damas y caballeros conforme a su costumbre y tomó asiento,
El veredicto sobre cada uno de los cargos, empezó a caer pesadamente: cargo 1, culpable; cargo 2, culpable, cargo 3; culpable... y así sucesivamente hasta llegar al décimo, el que generaba más dudas, el de lavado de dinero.
Sobre este cargo, la fiscalía presentó los testimoníos de varios ex socios de El Chapo pero escasas pruebas que evidenciaran la presunta fortuna del capo y que la revista Forbes tasa en catorce mil millones de dólares.
Pero ese día, el jurado no estaba para contemplaciones y no obstante el mar de dudas en que naufragaron durante casi 35 horas, incluso el lavado de dinero alcanzó el veredicto unánime de culpable.
Cuando iniciaron las deliberaciones contra El Chapo el martes 13 de noviembre, cayó sobre Nueva York una nevada poco regular para esa fecha.
Durante el duro testimonio de Juan Carlos Abadía ‘Chupeta’, la tormenta que cubrió el destino de El Chapo tomó forma de lluvia torrencias, de las que no suelen bañar estas calles.
Durante dos testimonios que resultaron cruciales, el del Ingeniero en Sistemas Cristian Rodríguez, y la del Agente de la DEA Víctor Vázquez, el termómetro marco 15 grados bajo cero, que enfrió el ánimo de la defensa, muda ante lo contundente de las pruebas presentadas.
Por eso a las 9 de la mañana de ayer cuando la tormenta Nadia empezó a cubrir con un manto de nieve la costa este de los Estados Unidos, muchos auguraron que el mal tiempo traería novedades y que finalmente el veredicto del juicio del siglo se conocería el martes 12 de febrero.
Así, unos minutos antes del mediodía, cuando cundió el rumor de que habría noticias en la sala 8D, las dos salas designadas para presenciar el juicio se llenaron rápidamente.
Primero entró el juez, un minuto más tarde el acusado y finalmente los miembros del jurado. El veredicto de culpable se escuchaba en la sala incluso antes de ser pronunciado.
Al conocerlo, El Chapo tensó las quijadas y no pudo evitar una mirada cargada de resentimiento hacia los que lo condenaron.
Cuando no hubo más que hacer, El Chapo se puso de pie y se despidió con un apretón de manos de cada uno de sus defensores. Luego juntó las yemas de su mano derecha y envió un beso a Emma Coronel, su esposa, que parecía la más conmovida.
Finalmente, custodiado por los alguaciles, abandonó la sala.
Sin Escape ni Retorno
Treinta minutos más tarde y en una aparición inusitada para su investidura, el fiscal del distrito Richard Donoghue ofreció una conferencia de prensa. Era importante magnificar el golpe de autoridad que acababan de demostrar.
Es un veredicto sin escape ni retorno, señaló insinuando el fin de la proclividad de El Chapo para huir de todo y subrayó: El Sangriento reinado de Joaquín Guzmán Loera en la cima del cártel de Sinaloa llegó a su fin, así como el mito de que no puede ser llevado a la justicia.
Mientras decenas de cámara ponían atención a las palabras del fiscal, Emma Coronel, vestida totalmente de negro y acompañada por dos policías abandonaba el escenario, aprovechando que los fotografos se encontraban distraidos en la figura de Donoghue.
El funcionario era custodiado por los asistentes que llevaron el caso y por agentes del FBI y la DEA los que a su vez eran vigilados por elementos del ejército estadounidense.
Al concluir la conferencia de prensa las tres decenas de empleados del gobierno regresaron al lobby de la Corte y se fundieron en abrazos, sonriendo satisfechos, en ese que para ellos fue un día de fiesta.
Apelaremos: La Defensa
Aparecieron después en la misma carpa los tres abogados de El Chapo. Jeffrey Litchman dijo que había sido un orgullo defenderlo y que habían peleado hasta la muerte.
En su turno, Eduardo Balarezo dijo que no descartan una apelación pues ese es el deseo de Guzmán Loera por lo que analizarán la posibilidad. Agregó que fueron los medios los que sentenciaron a El Chapo, quizá en respuesta a las críticas que apuntaban a que la defensa no había estado a la altura.
Todo queda ahora en manos del Juez Brian Cogan quien fijó el próximo 25 de junio para dictar sentencia, que de acuerdo a las calificaciones dadas a cada cargo no puede ser distinta a cadena perpetua... o varias.
Guzmán vistió de traje en cada una de las audiencias en los tres meses que se prolongó el llamado juicio del siglo. Luego de la sentencia que será dictada el próximo 25 de junio, su destino parece ser la prisión de máxima seguridad en Florence, Colorado: Super Max o ADX donde siempre vestirá un uniforme naranja.
Tratado lo Libra de la Pena Capital
Joaquín Loera Guzmán libró la pena capital gracias al artículo 8 del tratado de extradición entre México y los Estados Unidos de Norteamerica. La norma establece: Cuando el delito por el cual se solicita sea punible con la pena de muerte conforme a las leyes de la parte requirente y las de la parte requerida no permitan tal pena para ese delito, la extradición podrá ser rehusada a menos que la requirente dé las seguridades que la requerida estime suficientes que no se se impondrá.
