Buscar este blog

14 de abril de 2014

Huevones

Fernando Ramírez López
Ante la falta de argumentos para justificar sus acciones los ignorantes recurren a la descalificación y al insulto. Es el caso del alcalde en funciones de Torreón quien olvida que los funcionarios son mandatarios (los que obedecen) no mandantes (los que instruyen, los que ordenan) y que los ciudadanos tienen el derecho y la facultad de quitarles el empleo (su cargo de elección) en el momento en que incumplen con el trabajo que se les encomendó cuando fueron empleados (en las elecciones). En Torreón padecemos un alcalde que en el pasado reciente se ha caracterizado como porro y golpeador. El artículo de Fernando Ramírez López que compartimos el viernes por facebook, fue ocultado o eliminado en un intento por ejercer la censura, ante esa situación lo reproducimos en Hoy Acontecer de la Laguna a ver si de ahí también lo eliminan. Los funcionarios deben entender que como personajes públicos están expuestos a la crítica, un derecho de los ciudadanos que son a fin de cuentas los jefes de quienes están en el gobierno, pues así lo establece el máximo ordenamiento legal de nuestro país. En caso de una nueva eliminación de éste artículo, quien quiera leerlo puede solicitar una copia en nuestro correo electrónico periodista051@hotmail y con gusto se los haremos llegar.

Para los migrantes discapacitados, que en la lucha por la vida encontraron la desgracia.
 “Yo te amo ciudad, cuando persistes, cuando la muerte tiene en que sentarse, como un gigante ebrio a contemplarte”.
Testamento del Pez.

Miguel Ángel Riquelme
Solís.
Que poco sentido de la sensatez política y social tiene el presidente municipal de Torreón, al utilizar el calificativo “huevones” refiriéndose el llamado “Cabeza de Búfalo”, a todos aquellos que en esta democracia deforme “haiga sido como haiga sido” estamos formando y naturalmente criticando para hacerla viva, útil y llena de luz.
Ahí, en la expresión del citado personaje se advierte que a solo cien días de haber llegado a ocupar la titularidad del ejecutivo municipal, rinde un mediocre informe, todavía aspirando el olor del fraude, compra de votos y la utilización del hambre que padecen los habitantes de las zonas marginadas, para que no obstante que el PRI perdió las elecciones en Torreón, guarecidos en la trampa, con el apoyo de los partidos minoritarios lograron arribar al poder por un margen mínimo del electorado.
No necesitamos los que en esta ciudad vivimos de consultas populares, ni estudios formulados por consultorías especializadas o centros de investigación renombrados para saber que desde el más alto nivel que el estado mexicano, hasta esta ciudad en su momento revolucionaria, para saber que las cosas marchan perfectamente mal.
Tal vez, sean más útiles las herramientas utilizadas por los adivinos como son los horóscopos, cuarzos, tarot, control mental, lectura del aura, reiki, pulseras vitales, astrología, aromaterapia, interpretación de los sueños, lectura de café, lectura de mano y demás artes metafísicas, para que con esta ayuda Rubén Moreira y su patiño “Titino Riquelme” nos explique su incapacidad, porque ellos si saben que son ladrones, defraudadores e incapaces.
No pueden, no saben, no entienden el difícil y sobrio papel de la política, porque son arribistas, serviles a los poderosos y “lamehuevos” de la burguesía financiera y política de su entorno. Es tan sencillo saber que todo va mal en Torreón, que solo baste subirse a cualquier autobús, de cualquier ruta de camiones para saber la maldita suerte que tenemos los usuarios de padecer este infame servicio; y no se diga el cómo se defiende el sufrido peatón de los embates de una ciudad que carece de la mínima educación vial.
Adicionalmente, si nos damos una vuelta por colonias como “La Merced”, los vecinos son testigos de cómo se asesina diariamente, se asalta, se trafica con droga y demás lindezas delictivas, con una policía corrupta, impreparada y cobarde para enfrentarse al crimen, en una manifestación por demás diabólica.
Los dueños del dinero claro está que aquí no invierten, ni viven sus familias, en cambio sí tenemos una burocracia que cobra pero no entiende que hacer, para atraer la “inversión extranjera directa”; por lo que deben saber que para lograrlo debemos construir un aeropuerto de carga,  una vasta red de comunicaciones terrestres y una alta tecnología cibernética, además de atraerlos con ofertas fiscales atractivas y lugares apropiados para que se instalen.
Estos ofensores, no saben, porque no estudiaron, no piensan, no se informan, no trabajan, no sudan la camiseta, porque el servicio público deben saberlo es vocación y sacrificio; no disfrute y utilización personal del presupuesto público.
De ahí el menosprecio para este vaguito, muchachito desobediente que utiliza el insulto para comunicarse, porque no tiene otro lenguaje. Por si fuera poco la ciudadanía se ha percatado que el grupo de los “Moreira” son sátrapas y defraudadores de miles de millones, incluso la viuda del hijo asesinado de Humberto, vía twetter le dijo ¡Renuncia asesino!.
Y por esta ocasión no tocaré a la empresa Lala que se enriquece cada vez más con el usufructo desmedido de los mantos acuíferos con un agua en gran parte con arsénico.
¿Qué se puede esperar de Riquelme?. Nada bueno, de un ser que no tiene respeto por su comunidad y tiene como única salida el insulto. Que aclare cómo está la deuda de Torreón, el incremento de la nómina, el adeudo inconmensurable de la anterior administración y las quiebras de SIMAS y COPRODER.
¿Qué ha hecho por Torreón señor Riquelme?. Nada. La respuesta es nada, porque su subordinación al pelagatos de Rubén Moreira, no se lo permite, quién dicho sea de paso al perder electoralmente el PRI las ciudades más importantes de Coahuila, como la capital Saltillo, hemos tenido que soportar su desagradable presencia los torreonenses desde el primero de enero en que usted tomó posesión. Póngase a trabajar y busque un buen asesor, que le diga cómo se deben hacer las cosas. Déjese guiar, es más ya no haga nada, porque usted está en la situación de los que se están ahogando, entre más se mueven, más se hunden.
Ojalá que el calificativo que este sujeto Riquelme dio a los torreonenses, nos mueva como ciudadanos y seamos más exigentes con un ex porro del que nada bueno se puede esperar, incluyendo a regidores, síndicos y personal administrativo.
Esta tierra merece algo más, mucho más, podemos cambiar, hagámoslo juntos. La Laguna como región y no como sueño de opio, pretendiendo construir un nuevo Estado, que solo de pensarlo el proyecto atrofia y significa en esencia más burocracia y en consecuencia más ineficiencia. La alternativa es la unión por la lucha de causas y problemas comunes.
Email: licfernandora@hotmail.com
Celular: 871 163 3813