Fernando Ramírez López |
Asegura Fernando Ramírez López que en los primeros días de su administración el presidente Enrique Peña Nieto no ha mostrado indicios de cómo va resolver la desigualdad
social y económica que padecemos. Su opinión es respetable como la de todos y
aquí la compartimos con ustedes.
Para los que tienen
hambre y sed de justicia terrenal
“Menos mal que el tiempo es un vendaval que se lleva la pena
entre los días. Que lo mueve todo,
que todo lo transforma no permite
que ningún día se parezca a otro.
Vayan pues estos tiempos difíciles
a cuenta de tiempos mejores que sin duda llegarán.
De la primavera que volverá puntualmente
y de las flores que estallarán cualquier mañana
de las semillas que hoy, con las manos fundidas en la tierra
oscura y fría; estoy sembrando en mi jardín”.
Adela Celorio.
María Antonieta |
Esta
introducción sirve para ubicar el contexto en que el Gobierno mediocre de
Enrique Peña Nieto y sus colaboradores se mueve día a día,
sin considerar a los gobernantes Estatales y Municipales, más partidos
políticos hoy metidos en la barahúnda del pacto con México, han focalizado la
voluntad de los mencionados.
Han transcurrido 47 días del Gobierno
actual y no se observa ninguna labor que
permita saber que se hará con el problema de la desigualdad social que vive
México; circunstancialmente acá por el norte un periódico llamado KIOSCO,
envió a un par de corresponsales para que dieran fe de lo que sucedió en la
mañana del 1 de Diciembre en la ciudad de México y el grito fue “No somos guerrilleros pero pronto lo
seremos”, si no lo matamos el nos va a matar”, “Peña, el pueblo no te
eligió”.
Esta narrativa de la contraparte
vivida en la multitud afuera de San Lázaro, refleja el hartazgo ciudadano que
vive en el país. En 1910 Porfirio Díaz declaraba que en este país todo era paz y
progreso, sin imaginarse que se fraguaba una sangrienta revolución por cierto
la primera del siglo XX.
Hoy ante los designios de
Washington y Wall Street, la burguesía financiera y política de México se mueve
a un mismo ritmo, sin percatarse que hace
apenas unos días el cándido Subsecretario de SEDESOL, Javier Guerrero aceptó
que existen más de 13 millones de mexicanos en condiciones infrahumanas de
vida.
Enrique Peña Nieto |
Si
a esto aunamos que Peña Nieto ha hecho de su Gabinete un Club,
dejando de lado la sequía, el problema educativo, la falta de empleo, los
asesinatos que siguen sin detenerse, para lo cual es importante señalar que
también ya suceden en el Distrito Federal y en el Estado de México, es decir el
problema se ha generalizado.
Por
si fuera poco el Secretario de Hacienda declara hace apenas unas horas que se
pondrá un hasta aquí al endeudamiento de Estados y Municipios;
olvidándose que la gran tajada se la llevaron Presidentes y Gobernadores, entre
ellos Humberto Moreira y el cobarde de su hermano Rubén, el cual anda buscando
oportunidades de inversiones en Detroit, cuando en esta localidad lo que hace
falta es empleo.
La adquisición masiva de armas de
guerra y balas en estados unidos, más la destrucción de la Universidad de
Siria, el problema Venezolano, Irán, su
bomba nuclear y el enfrentamiento con el sionismo no nos hace nada
halagüeño el futuro inmediato. Lo cierto
es que el secuestro, el crimen, el robo, el cierre de negocios, el cobro de uso
de suelo y tantas otras lindezas siguen siendo el pan nuestro de cada día.
Mientras
Enrique Peña Nieto no deje de ser un títere y no adquiera
su verdadera personalidad, que como dijera Carlos Fuentes, no es cuestión de
cultura sino de capacidad de estadista y remató comentando: “Lázaro Cárdenas
del Río no fue un hombre de gran preparación académica pero si profundamente
comprometido con las causas sociales y lo expresaba “Les doy mi tiempo porque
es lo único que tengo””.
Este
país requiere un cambio radical a corto plazo y no será la
represión, ni el cebado de líderes como los que existen en la CFE, SNTE, TELMEX
y PEMEX, la solución.
Tampoco
lo será la corrupción y la conducta insensible de la alta burocracia,
sino la de aquel Gobierno que mano a mano trabaje con cada uno de los
mexicanos, porque de no ser así seria muy triste y lamentable que el Palacio
Nacional, le esperara algo más allá que las cámaras y periódicos corruptos que
aceptan múltiples canonjías que se encargan de construir una realidad que
indiscutiblemente no es la que muchos millones de ciudadanos vivimos hoy en
día: la de falta de empleo y oportunidades.
Reflexione Señor Presidente.
(*)
Analista Social. Email: licfernandora@hotmail.com