Todavía nada para nadie en la elección de gobernador en Coahuila

Contra lo divulgado en las redes sociales por los candidatos perdedores de la elección del 4 de junio todavía no hay nada para nadie y el proceso está muy lejos de anularse no obstante el rebase en el tope de campaña, del particular se ocupa en su columna Café Político el compañero Ramón Betancourt que compara el proceso de calificación con un juego de futbol americano que como se sabe se compone de cuatro tiempos o cuartos. El asunto concluirá allá para octubre o noviembre, cuando el TEPJF pronuncie su sentencia y determine si anula el proceso con la designación de un gobernador interino, o ratifica el triunfo de Riquelme.

"Por eso las hacen pandas

porque las montan tiernas"

Refrán Popular

LA MAJADA Y EL GUSSY. En los serpentarios políticos con aíre acondicionado –cafés, bares y restaurantes, sobre todo en La Majada y en El Gussy– me han preguntado acerca de la judicialización del proceso electoral en Coahuila. No he querido contestarles de manera extensa y tediosa, por lo que mi respuesta la he simplificado de la siguiente manera: 1) Todo este escandalazo postelectoral es como un juego de fútbol americano. 2) Recordar que este bello deporte tiene 4 tiempos o cuatro cuartos. En el asunto que nos ocupa, en Coahuila vamos en el primer cuarto. 3) El que conoce en primer término y entra al estudio de si hubo o no anomalías e irregularidades es el Instituto Nacional Electoral (INE). 4) Cabe destacar que al INE, hoy llamado INEptitud Nacional Electoral, por su incapacidad, indolencia, torpeza y cerrazón, le corresponden –de éste “juego de futbol americano”– los dos primeros cuartos.

FIESTAS Y HOLGANZAS. 5) Huelga decir que el INE dejó tirada su chamba, y cual si fuese una democracia humillada y mancillada la de Coahuila, los consejeros agarraron sus chivas y se fueron de vacaciones. Hasta aquí el primer cuarto del juego. 6) Una vez que regresen de su periplo los consejeros se adentrarán nuevamente al “estudio” del rebase de gastos. Es decir, ya no podrán restar Miguel Riquelme y Guillermo Anaya. Por el contrario, si podrán incrementarse los gastos de campaña. Vamos, los montos definitivos por gastos y sanciones aún podrían ser modificados a partir de la revisión de los engroses que harán los consejeros una vez que regresen de sus fiestas y holganzas. En este caso don Memo podría rebasar el tope que tiene de 4.6% y exceder el 5 por ciento. 7) El tercer cuarto lo comprende la revisión, estudio y sentencia que tendrá que emitir el Tribunal Electoral de Coahuila (TEC).

EL ÚLTIMO CUARTO. 8) El último cuarto –4/4– será el definitivo y le corresponde al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), quien tendrá la indeclinable labor de impartir justicia para que se respete la voluntad popular de los coahuilenses que fueron a votar el domingo 4 de junio. Estos son los cuatro cuartos de esta judicialización poselectoral. La sentencia que habrá de emitir el TEPJF no podrá ser recurrida en otra instancia ya que ésta es la última. Y aquí se acaba todo ya que la sentencia será cosa juzgada, definitiva e inatacable. Se comenta que la decisión que tome el TEPJF será a mediados o finales de octubre. Con este simple ejemplo de que la judicialización electoral se parece a un juego de fútbol americano, deja por sentado que aún falta mucho tramo que recorrer para que el Partido Acción Nacional se diga ganador de la contienda en Coahuila. O para que aseguren que la elección se va a anular, como lo han venido haciendo a través de las redes sociales. Es obvio que algunos panistas traten de confundir a los que navegan por la Internet ya que dan por hecho que la “elección se anulará” por el simple hecho de que Riquelme rebasó el 5% de gastos de campaña. Esta idea de confundir a los internautas de buena fe a través de esas #FakeNews (noticias y comentarios falsos de toda falsedad), de nada servirán ya que la última instancia –TEPJF–, no trabaja bajo presiones políticas y menos por lo que se publica en Facebook o Twitter.

GLOSA. Ahora bien, es importante hacer una glosa del trabajo que ha realizado el Instituto Nacional Electoral a la fecha. Y la verdad es que esta glosa no lo deja bien parado. Mire usted: A) Al INE se le hizo bolas el engrudo a las primeras de cambio. El Instituto ha dejado por sentado que sus consejeros obedecen más a los compromisos que tienen con los partidos políticos que los propusieron y proyectaron, que a la estricta aplicación del estado de derecho. Vamos: la Constitución y la ley electoral han sido letra muerta para ellos. B) El INE ha cometido faltas, omisiones y errores burdos y ramplones. Y claro, eso en lugar de ayudar al PAN, que ha echado las campanas al vuelo, lo perjudican porque es altamente probable que los dos tribunales electorales –el local y el federal–, les de palo. Y digo ello por lo tosco y grosero que han prevaricado con la Constitución (Carta Magna) y con la Ley Electoral.

VIOLACIONES GRAVES, DOLOSAS Y DETERMINANTES. C) Lo que gastó Miguel Riquelme fue un total de 20 millones 754 mil pesos, contra 20 millones 120 mil pesos de Memo Anaya. Es decir, una bicoca de apenas 634 mil pesos. D) No se puede adelantar una inminente anulación de la elección. Las afirmaciones deben tomarse con reservas, al ser el TEPJF el único con la potestad de tomar esta decisión. Vamos, el rebase del tope de gastos de campaña, no supone –en sí mismo– la nulidad de la elección. Hay jurisprudencia al respecto. E) Para que se anule una elección se tienen que dar tres supuestos en base al Artículo 41, fracción VI de la Constitución General de la República que instituye: “La ley establecerá el sistema de nulidades de las elecciones federales o locales por violaciones graves, dolosas y determinantes en los siguientes casos: a) Se exceda el gasto de campaña en un cinco por ciento del monto total autorizado.

EL COCHINERO DEL INE. F) En el caso que nos ocupa, el que Riquelme haya superado apenas en 634 mil pesos al rebase de tope de Anaya (hasta al día de hoy, toda vez que los gastos de Memo podrían incrementarse), lógico es suponer que no debería ser considerado como una violación grave, dolosa y determinante (acciones copulativas, es decir, que se den los tres supuestos), que hayan influido para que ganara la elección por 30 mil votos. G) Otro error craso del cochinero en que se ha convertido el INE es que de manera ilegal y mezquina extendieron términos improrrogables descritos en la ley para que los partidos presentaran pruebas de gastos. En esta irregularidad los jurisconsultos en materia electoral, apuesten tronchado a que el TEPJF derogará de manera pronta y expedita este absurdo debido a que los plazos son improrrogables de acuerdo a la disposición legal contenida en el Artículo 80, Inciso D, Fracción VI, de la Ley General de Partidos Políticos que mandata: “VI.- Una vez aprobado el dictamen consolidado así como el proyecto de resolución respectivo, la Comisión de Fiscalización, a través de su Presidente, someterá a consideración del Consejo los proyectos para que éstos sean votados en un término improrrogable de seis días”. Y los consejeros lo hicieron en 8 días. Recordar que Dura lex, sed lex (la ley es dura, pero es la ley). Esta es una máxima jurídica que expresa la necesidad y la obligación de respetar y aplicar la ley en todos los casos, incluso cuando esta pudiera resultar rigurosa o excesiva.

ACUERDOS POLÍTICOS. H) En estos solo dos ejemplos (por supuesto que hay más ilegalidades del INE) el PRI y Riquelme tienen bastante tela de donde cortar para echar abajo la supuesta “anulación” que como crónica de una elección anunciada, Acción Nacional ha tratado de hacer creer que es inminente. I) Para terminar con esta entrega. Podríamos glosar que el primer cuarto lo va ganando el PAN por un gol de campo. J) También podemos concluir que el INE ha hecho todo lo posible para diagnosticar en contra del priista Miguel Riquelme y favorecer a Guillermo Anaya. Esta transgresión de los más elementales principios del derecho, se traduce a que pesan y pueden más los acuerdos políticos, que la estricta aplicación de la ley. Ahora bien, es necesario recordar que el INE no dictamina elecciones; no decide quién ganó y quién perdió. Es solo un órgano administrativo de fiscalización cuyos dictámenes que emita, no necesariamente implica la anulación de elecciones. K) Y si recordamos que los partidos de fútbol americano tienen cuatro cuartos y apenas vamos en el primero, entonces es lógico concluir que todavía falta mucho tiempo e instancias legales para que continúe dirimiéndose la litis electoral. Como tres meses cuando menos. O sea, no hay nada para nadie. Es más, los analistas políticos nacionales, la gran mayoría, coinciden en señalar que finalmente el ganador será el priista Miguel Ángel Riquelme Solís. En fin.