Por Guillermo ANAYA LLAMAS
En esta columna he venido señalando
algunas de las irregularidades
En las próximas semanas el gabinete del gobernar Humberto Moreira habrá de sufrir cambios y enroques de funcionario como resultado de la solicitud de licencia que el ejecutivo presentará para ir en busca de la dirigencia nacional del PRI, el primero de esos cambios de hecho ya se dio con la salida del ahora ex Secretario General de Gobierno, Armando Luna Canales, quien fue sustituido por David Aguillón Rosales, persona de todas las confianzas del gobernador y quien ocupara la Dirección General de Comunicación Social. Armando Luna Canales fue nombrado por Rubén Moreira como Secretario de Organización del Comité Directivo Estatal del PRI, designación que a todas luces da muestras del control que el clan Moreira tiene de la estructura de gobierno y del partido, en donde se quitan y ponen a funcionarios a modo y afines a su proyecto personal, dejando a un lado a priistas que se quedan esperando una oportunidad. Otro de los cambios que se esperan en los próximos días será el del Secretario de Desarrollo Social Jorge Torres López, quien se vislumbra vaya a sustituir al gobernador Moreira, recordando que este funcionario ocupó la Presidencia Municipal de Saltillo cuando el entonces alcalde Fernando de las Fuentes dejó el cargo para contender por la diputación local, ahora de nueva cuenta este funcionario se presta a cubrirle las espaldas a su “jefe”. Los cambios y enroques que se prevén realicen los Moreira en la estructura gubernamental y de partido, serán una muestra clara de la desconfianza que ellos tienen en los cuadros priistas, puesto que lejos de buscar a priistas que vengan a enderezar las deficiencias que se tienen en el combate al desempleo y a la inseguridad que priva en la entidad, buscaran colocar en los cargos que se dejen vacantes a políticos incondicionales que cuiden y cubran las trapacerías que el clan Moreira ha venido realizando en la entidad, trapacerías que irán saliendo a la luz pública con el tiempo.
En esta columna he venido señalando algunas de las irregularidades que el gobierno de Moreira ha hecho en Coahuila, como ejemplo la denuncia del manejo político-electoral del llamado “Monedero de la Gente”; el gran endeudamiento que heredará Humberto al próximo gobierno; y la más reciente, el programa “Tarjeta de Salud de la Gente” que sin decir cuánto costara al erario y cómo operará, puso en marcha el gobernador en su quinto informe de gobierno y mediante el cual se pretende “beneficiar” a cerca de un millón de personas; de esta tarjeta de salud, hasta donde se sabe el gobernador está haciendo un desvío de recursos públicos del Seguro Popular, recursos que provienen de la Federación. Sobre los cambios de funcionarios estatales y municipales que se van a dar al corto plazo, los coahuilenses ya tenemos antecedentes, cabe recordar que hace tres años, la estructura gubernamental estatal y de los municipios se vio fuertemente afectada, ya que a designio de los Moreira, un buen número de diputados locales y alcaldes dejaron sus cargos para “chapuliniar” a otros puestos, caso Eduardo Olmos entre otros, todo con el fin de tener en los puestos claves a personas que cimienten su proyecto de familia. Al tiempo veremos los cambios y de ellos no se esperan novedades positivas para nuestro Estado.
Guillermo Anaya Llamas es Senador panista por Coahuila.
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