Buscar este blog

24 de agosto de 2013

El Sexódromo: Diálogos BDSM

Verónica Maza Bustamante
En su semanal entrega de El Sexódromo, columna que escribe en la sección El Ángel Exterminador de Milenio Diario Laguna, la sexóloga Verónica Maza Bustamante aborda un tema que para muchos quizá resulte controvertido pero que forma parte de la gran diversidad que existe en materia de preferencias sexuales, esto es de bondage y relaciones sádico masoquistas.  


“Es difícil vivir el sadomasoquismo de manera cotidiana. Ya ni hablemos del 24/7 para las damas”.
México • La Comunidad BDSM Guadalajara fue creada hace años en la capital de Jalisco pero se ha afianzado desde hace más de uno con el objetivo de unir a personas que gusten del bondage y la disciplina, la dominación y sumisión, el sadismo y masoquismo. Se reúnen cada sábado último de mes en el Rojo Café para convivir y ayudar a quienes deseen aprender o gusten de este estilo de vida. Además, realizan talleres prácticos y teóricos, fiestas y juegos.
En una visita a la Perla Tapatía pude reunirme con tres integrantes del grupo: Amo Arduj, Amo Galahad y Jonathan. Ésta es parte de la conversación que sostuvimos en la cálida intimidad de un salón en la galería de arte y bar Lobo Santo.
Verónica Maza Bustamante (VMB): Arduj, tú fuiste el primero del grupo que contacté, a través de Facebook. Cuéntame cómo comenzó la comunidad.
Amo Arduj (AA): Ya había habido grupos BDSM en Guadalajara, pero se desintegraron, volvieron a surgir. Yo entré en este mundo en 2004. No vivía en Guadalajara sino en San Luis Potosí, donde lo comencé a experimentar.
(VMB): ¿En San Luis Potosí había una comunidad o comenzaste a experimentar por tu cuenta?
AA: Descubrí cosas por internet; cuando las leí supe que eso era lo que tenía dentro. En San Luis conocí a una chava con la que empecé a conocer no mi parte dominante, sino su lado sumiso, y me gustó. Exploré con ella, luego lo hice por mi cuenta durante seis años. En Guadalajara me enteré por la red de que había una comunidad BDSM, cosa que no existía en mi ciudad natal, donde la gente es muy mocha. Fue maravilloso saber que en Guadalajara las personas son más abiertas.
Puse un anuncio en una página, que decía: “Busco sumisa”. Fue una palabra mágica, porque me comenzaron a contactar no solo sumisas sino también dominantes. Así conocí a los integrantes de la comunidad de aquel entonces: gente muy preparada, muy culta, y eso me sorprendió, porque yo creía que esto del BDSM era del bajo mundo, muy alternativo. La coordinadora era una chava sumisa, y yo solo conocía organizadores dominantes. Nos citamos en un café en el Centro y cuando le pregunté si podía llevar a mi sumisa se alegró porque, me dijo, normalmente la contactaban hombres solos que buscaban sexo. Era muy abierta, muy honesta, me dio confianza.
Yo había tenido varias sumisas en esos seis años, pero la que tenía en ese momento solo me había tenido a mí como amo. Sabíamos de las tres reglas de oro del “sano, seguro y consensuado”, aunque estando en el grupo me di cuenta que eran concientes de ellas, no solo era teoría .
VMB: De hecho, se tendrían que aplicar en general, no solo en la práctica BDSM.
AA: Exacto. Incluirlo en tu vida, cuidarte y cuidar a la gente que está a tu alrededor, practique o no el BDSM, porque también hay que proteger a los que te rodean y no comparten tu forma de vida. Respeto ante todo.
Ilustración: Sandoval
Jonathan (J): Yo estoy en la comunidad desde hace algunos años. Lo que menciona Arduj es una regla básica del grupo, el respeto.
AA: Es difícil vivir el sadomasoquismo de manera cotidiana. Ya ni hablemos del 24/7 (experimentarlo las 24 horas los siete días de la semana) para las damas. A veces conocen personas que no tienen la misma forma de vida y comienzan a poner restricciones, a quitarles tiempo de calidad para el BDSM.
VMB: Si practicas algo que te llena tanto que podrías hacerlo las 24 horas, ¿por qué te relacionas amorosamente con personas que no lo practican?
J: Bueno, hay diferentes tipos de prácticas. Por ejemplo, las ciberelaciones, en donde todo sucede solo por internet. O los que se casan con su contraparte BDSM y lo llevan bien. Es importante hablarlo.
Amo Galahad: Cuando no tienes pareja puedes explorar con varias personas, pero cuando te relacionas con alguien tiendes a vivir tu dominación o sumisión solo con él o ella.
VMB: ¿Ustedes lo practican con sus novias o esposas siempre?
AA: Dentro del grupo hay pocos matrimonios y creo que nadie practica con su pareja.
J: Desde el principio hay que definir qué tipo de relación se va a manejar, si se van a involucrar sentimientos o no. Tengo 23 años de edad y empecé a los 17 con una novia; ella me fue introduciendo. En 2010 hice un grupo en Facebook.
AG: Organizaba reuniones pero no iba.
J: El grupo yo lo abrí porque todos me decían que era “un niño” y lo veía como juego, pero en realidad yo quería desarrollarme en ese aspecto.
AG: A nosotros desde muy jóvenes nos gustó y nos costó tanto trabajo asumir nuestro gusto, que ahora entendemos a los más chavos. Tenemos el deber de ayudarles a que entren bien a la práctica. Estamos creando talleres para que sepan más, con el único fin de ayudar a los nuevos.
VMB: ¿Cobran por los talleres?
AG: No, a veces acabamos perdiendo, porque gastamos en los materiales para desarrollar un tema y no les cobramos nada. Yo en mis inicios fui switch (dominante y sumiso) y lo traigo desde los ocho años. Recuerdo que a esa edad vi una escena donde amarraban a una actriz y sentí placer, aunque no lo entendía. Más adelante comencé a buscar literatura. Identifiqué el sadismo y el masoquismo. Mi adolescencia fue muy intensa en ese sentido, muy confusa. Venía de una familia muy moralista, muy tradicional, y yo teniendo esos pensamientos, sentía que no encajaba.
La primera sumisa que yo sesioné era una chica de Zamora, Michoacán. Según yo iba muy seguro; había leído mucho pero ella no sabía que nunca había practicado. Nos fue bien. No establecimos una relación formal pero aún tengo contacto esporádico con ella.
AA: A mí lo que me gusta es la dominación psicológica. Provocar la sensación física a través de palabras, de la voz o con contacto pero sin llegar a lastimar, sin ser brusco. Hay gente que solo hace bondage y son unos artistas. A otros les gusta servir y obedecer. Hay mujeres que son dominantes siendo sumisas, es decir, ellas te dicen cómo les pegues, dónde, con qué intensidad. Están dando las órdenes pero, a la vez, se están dejando someter.
VMB: Eso más que switcheo es dobleteo.
AA: Sí, porque está ejerciendo los dos roles de manera simultánea. Otros son fetichistas: de pies, de las botas, del látex, del cuero. A unos más les gusta ser “mascotas”.
VMB: A los que practican el ballbusting les gusta que les pateen los testículos.
AG: A otros les atraen los olores, las mordidas, hay prácticas muy simples y otras muy extremas o sofisticadas.
AA: Todo se vale siempre y cuando se cumplan las tres reglas básicas: sano, seguro y consensuado. Se puede hacer un contrato de sumisión, pero tendría que tener el mismo significado para el amo que para el sumiso para que funcione.
VMB: ¿Hacia dónde les gustaría que se dirigiera la comunidad? ¿Qué sigue?
AA: Lo que hace diferente esta comunidad de las anteriores es que tenemos más experiencia. Hay más organización. Se seleccionaron cinco administradores. Ahora tenemos reglas escritas y publicadas. Ya hemos expulsado a unos cuantos.
J: Los administradores son tres dominantes y dos sumisas, así que tenemos puntos de vista diversos. A mí el grupo me ha ayudado hasta a comportarme en sociedad, porque a veces soy muy explosivo. Me ha hecho una mejor persona.
VMB: Creo que tú puedes hacerle un bien a tu entorno entendiendo lo que te gusta, asumiendo tu práctica y hasta “profesionalizándote” en ella; eso te podría hacer una mejor persona porque estarías viviendo lo que eres.
¿Es cierto que si alguien quiere pertenecer a la comunidad los debe contactar y ustedes le hacen una entrevista personal donde estén tres personas del grupo para determinar si la práctica que le interesa es BDSM u otra cosa?
AA: Sí. La pregunta clave es ¿por qué quieren entrar a la comunidad? A algunos les gusta la violencia, otros buscan sexo. Aquí no es su lugar. Pero para muchos más sí lo es. Me pueden contactar en Facebook.com/arduj y platicar al respecto.
@draverotika
www.facebook.com/veronicamazab


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.