Buscar este blog

14 de diciembre de 2010

Orgía de Lecturas

El Diputado Local y Presidente del Comité Municipal del Partido Revolucionario Institucional JESÚS SALVADOR HERNÁNDEZ VÉLEZ en el espacio que le ceden varios medios escritos de Coahuila comento acerca de la convocatoria lanzada por su Instituto para celebrar el centenario de la Revolución Mexicana para leer 30 libros durante 30 días con temas alusivos a nuestro movimiento social, la actividad rebasó ampliamente las expectativas que se generaron.
 "Hay en la experiencia de leer una felicidad
 y libertad que resultan adictivas"
                                                                                Gabriel Zaid


Somos un país con una tradición muy pobre en el hábito de la lectura. En el marco del Centenario de la Revolución, el PRI Torreón en noviembre lanzó una convocatoria: leer 30 libros sobre aspectos de la Revolución, uno por día. Los grupos se organizaron durante octubre e invitaron a sus compañeros para llevar a cabo dicha actividad. Les pareció una iniciativa inédita, empezaron a participar por curiosidad. El primer texto leído fue "México insurgente", de John Reed. Afrontaron el reto ex alcaldes y ex presidentes del comité tricolor. Esa aventura duró 10 horas y media.
Lectura tras lectura el entusiasmo crecía, conocer las batallas que condujeron a la caída de Díaz, exaltadas en la narrativa de Reed, hacía crecer el entusiasmo por conocer más. Los comentarios entre los asistentes aumentaban. Animaba conocer de dónde venimos, quiénes somos ahora. Nos permitió ubicar en dónde estamos. Furtivamente se sumaron a escuchar los siguientes lectores. Querían observar el proceso de lectura continua, cómo se consumía la obra, sentir lo que estaba pasando, imaginarse su participación. Calcular el tiempo de cada página, observar a los diferentes militantes. Cuchicheaban cómo leía fulano o zutano, analizaban la personalidad única de quien estaba atrás del atril. Y se daban ánimos para cuando les tocara. Querían percibir, sentir el reflejo de cada participante. Disfrutaban cómo el presente expresado en el acto de leer se trasladaba al pasado. Vivir la experiencia de una acción como la que señala Alberto Manguel: "... un fluir constante del lenguaje que permite a las palabras moldear y nombrar una realidad en constante proceso de formación", era, como lo dijo una lectora, "una cosa diferente, alentadora y muy padre".
En la medida en que día a día se consumían más obras, se recreaba la memoria de las narraciones de los acontecimientos alimentadas con palabras, se conocían las historias ajenas y lejanas, y se sentían participes en ellas. Se reconocían las experiencias que ahora en el momento actual nos ayudan a reencauzar el camino perdido, pues para sustentar el nuevo rumbo que exige nuestro país, y nuestra región en particular, sólo puede ser posible a partir de reconocer qué somos, en qué condiciones nos encontramos y cómo llegamos a esta situación.
Esta aventura de lo que es el acto de leer dejemos que nos lo recree Manguel: "Soñar historias, contar historias, escribir historias, leer historias, son artes complementarias que otorgan palabras a nuestro sentido de la realidad y pueden servir para aprender a través de los otros, para transmitir la memoria, para educar o como advertencia". Así se fue percibiendo por los diferentes grupos las lecturas que nos traían a la memoria crónicas de los acontecimientos revolucionarios, desde los movimientos de Cananea y Río Blanco, los de Viesca y las Vacas en Coahuila previo al estallido revolucionario, promovidos por los magonistas; las tomas de Ciudad Juárez, Zacatecas y Torreón por los villistas; las luchas encabezadas por Emiliano Zapata en el suroeste del país; la decena trágica; el asesinato de Madero; el levantamiento convocado por don Venustiano Carranza; la Convención de Aguascalientes; la Constitución del 17, hasta llegar a Lázaro Cárdenas.
La serie de nuestras historias se fue desarrollando de menos a más. Al principio se batalló para integrar los equipos, luego individualmente empezaron a solicitar ser incluidos. Después grupos integrados solicitaron leer un libro, esto obligó a los organizadores del PRI Municipal de Torreón a organizar el 20 de Noviembre a más de 120 grupos que leyeron en sus colonias. El último día de noviembre cerraron las lecturas cinco grupos.
Festejo la aprobación de la Ley de Fomento a la Lectura y el Libro impulsada por los diputados Esther Quintana y Ramiro Flores, y la convocatoria del líder del Congreso local, Fernando de la Fuentes, a un ejercicio para promover esta afición tan placentera, en el seno de la Cámara. Todo ello invita a seguir promoviendo la lectura. En relación al acto de leer, Daniel Pennac sentencia: "...en una película todo está dado, nada se conquista, todo está masticado, la imagen, el sonido, los decorados, la música de fondo... en la lectura hay que imaginar todo, es un acto de creación permanente".
Salvador Hernández Vélez
jshvelez@hotmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.