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24 de septiembre de 2013

Desacato reiterado

Jorge Alonso Guerra Macías.
Pareciera que los titulares de la autoridad -el caso del alcalde de Torreón Eduardo Olmos Castro-, se sienten por encima de la ley por lo que incurren en situaciones irregulares tales como el desacato continuado hacia una autoridad judicial, señala en su columna Todoterreno el abogado Jorge Alonso Guerra Macías, quien publica todos los viernes en Milenio Diario Laguna.

Desacato, significa desobediencia a un mandato judicial, y únicamente se debe ejercer por parte de un juez. El sinónimo de desacato es, rebelión, indisciplina, irreverencia hacia una autoridad judicial. Y tal parece que nuestras autoridades municipales en Torreón están haciendo caso omiso a esta delicada orden de una autoridad judicial como lo es un Juez Federal -Juez de Distrito- y no me refiero al desacato que está cometiendo en estos momentos dicha autoridad, por no devolver el tesorero municipal $50.000 pesos por concepto de cobro indebido de impuestos a un contribuyente, inclusive tanto el Alcalde de Torreón como su tesorero, ya fueron multados con 100 salarios mínimos como medida de apremio, pudiendo alcanzar 10 años de inhabilitación política y hasta de cárcel. Sentencia que emitirá la Suprema Corte, en breve.
Eduardo Olmos Castro.
El desacato reiterado que está cometiendo las autoridades municipales prácticamente es a diario, un ejemplo es cuando en una infracción de tránsito, el conductor es despojado de una garantía, como sería su licencia de conducir, un placa, inclusive hasta el mismo vehículo. La Constitución en su artículo 16 ordena, que nadie debe ser molestado, en su persona, familia, domicilio, papeles, o posesiones, sino en virtud de mandamiento escrito de autoridad competente. Pero no obstante lo consagrado en la Constitución y los múltiples amparos que se resuelven mes con mes ordenando a las autoridades municipales la inmediata devolución de la garantías recogidas por los agentes de vialidad, dichas autoridades siguen despojando arbitrariamente al ciudadano de sus papeles o pertenencias, como garantía, exponiéndose a que la autoridad judicial integre un expediente por desacato reiterado. El despojar arbitrariamente al conductor de un bien personal, como lo es una licencia o placa, le ocasiona múltiples molestias, y no se diga si dicho conductor no radica en esta ciudad, es decir, solamente va de paso, pues debe trasladarse al centro de entrega de garantías para recuperar la misma previo pago, el cual lo podría hacer en forma electrónica desde cualquier parte del país. Además el horario donde se pagan las infracciones fue reducido en esta administración, pues en la anterior se laboraba de 8 am a 18 pm de lunes a sábado, ahora solamente de 9 am a 15 horas de lunes a viernes. Es decir, si un conductor foráneo es infraccionado un viernes por la tarde, debe quedarse hasta el lunes para recuperar su placa o licencia o arriesgarse a regresar a su ciudad sin dichos documentos.
Es por esto que se debe dar cabal cumplimiento a la Constitución y dejar de obrar arbitrariamente en contra de los ciudadanos, donde los mismos son despojados de sus bienes si previa orden judicial de autoridad competente o exponerse a que se abra un juicio por desacato.

Salida a hombros

Gerardo Hernández
González
La democracia y las redes sociales en Internet tienen consecuencias positivas en México, una de ellas que ya no es tan fácil que los gobiernos engañen a los ciudadanos, la segunda que posibilita el ejercicio de la libre expresión y de un periodismo crítico, asegura Gerardo Hernández González en la columna Capitolio que se publica en varios medios coahuilenses, entre otros Zócalo de Saltillo y Milenio Diario Laguna.

Enrique Peña Nieto.
Los políticos piden, con razón, que los medios hablen también de lo bueno. Si no de su desempeño, tarea que corresponde a las direcciones de comunicación social de cada gobierno, sí al menos de los progresos que ocurren en el país, los estados y los municipios. En verdad, existen cosas positivas que contar. Sin embargo, luego de que por decenios el presidente de la República ocupara las ocho columnas de cada día, siempre en términos encomiásticos, era obvio que incluso antes de la alternancia sectores de la prensa empezara a sacudirse el yugo y a desmitificar a figuras antes intocables.
Lo mismo sucedió en la España posfranquista. El ejercicio de una prensa libre es consustancial a las democracias maduras. Algunos medios de Europa y Estados Unidos son implacables y particularmente ácidos con sus políticos. Como figuras públicas, sus actos son vigilados incluso en sus más mínimos detalles. En México sucede lo mismo, por una demanda ciudadana y la irrupción de las redes sociales que en ciertos momentos marcan la agenda a los periódicos, la radio y la televisión. Ya no se puede ser soldado del PRI, del PAN o del PRD sin pagar costos en términos de lectores, audiencias y credibilidad.
Luíz Fernando Salazar 
El presidente, los gobernadores y los alcaldes son objeto de crítica y de caricaturas en algunos casos ofensivas. Sin embargo, por molestas que resulten, reflejan el sentimiento de un grupo o de una colectividad. El argumento es “si las autoridades, de todos los partidos, tratan mal al pueblo, ¿por qué nadie iba a increparlas?”. Finalmente, cada autor es responsable de lo que publica. Ningún estado puede impedirlo. La regulación debe venir de los propios medios. Por eso es necesario que cada uno cuente con un código de ética.
José López Portillo.
Pero mientras la percepción que la ciudadanía tiene de los políticos sea reprobatoria, difícilmente los gobiernos podrán tener buena prensa. Si la autoritaria fórmula lopezportillista de “no pago para que me peguen” resultó funesta, su variante contraria: “pago para que me adules”, tampoco resuelve el problema. Al contrario, lo profundiza, pues vuelve odioso al objeto del halago. Además, claro, de lo oneroso que resulta para el erario. Un caso paradigmático es el de Humberto Moreira.
Carlos Salinas de Gortari.
Los congresos (federal y locales) aparecen entre las instituciones peor calificadas en encuestas nacionales de credibilidad. Suelen compartir los últimos lugares con los sindicatos. Y todavía por debajo de ellos están los partidos. Sin embargo, el Congreso de Coahuila tomó una decisión plausible el 10 de septiembre: excluir las corridas de toros, las novilladas y la charrería, entre otras actividades, de la nueva Ley de Protección y Trato Digno a los Animales. Gran parte del mérito es del presidente de la Junta de Gobierno, Eliseo Mendoza Berrueto.
Los diputados que votaron contra la prohibición no solo preservan una tradición centenaria, base de un arte expresado en la música, la pintura, el teatro, la literatura, también contribuyen a evitar la extinción de reses bravas, pues sin fiesta, sencillamente, no habría toros. Haber tomado en cuenta a las legiones silenciosas que defienden las corridas, frente a la estridencia de quienes se oponen a ellas sin conocer su historia ni su esencia, constituye asimismo un acto democrático. En un país libre, nadie puede imponer a otro sus preferencias ni sus aversiones.
gerardo.espacio4@gmail.com
@espacio4.m

La diferencia entre los héroes patrios y los políticos

César Augusto.
Instalado en su alter ego de Gastón Franco, el economista Eduardo Holguín es autor de la columna Salve César que se publica los sábados en Milenio Diario Laguna.

César y Brutus se colaron al evento organizado por Peñoles en el Palacio de Hierro, de México, DF: “Biogénesis: el origen de la vida”. Donde se presentaron las tendencias de la moda en joyería de plata. El vino servido en el magnífico evento fue un Cabernet Sauvignon de pura cepa coahuilense, es decir, producido por Casa Madero. Los barberos de César y Brutus aprovecharon para brindar por los cumpleañeros, tocayos y tata mandones Miquel Riquelme y Miguel Mery.
––Oye compadre, yo creo que tu eres de esos analfabetas cibernéticos.
––¿Por que dices eso, Brutus?
––¿Tienes Facebook.
––¡No!
––¿Tienes Twitter?
––¡No!
––¿Tienes Whatsapp?
––¡No!
––Entonces, ¿qué tienes?
––Tengo una vida.
––Mándamela para Candy Crush.
––¡Maldito Brutus!, si yo soy un analfabeta cibernético, tu eres un enajenado de las redes sociales.
––¡No!, compadre. A mi lo que me gusta es la política.
––Haber mi Brutus, ya que estamos en el mes más mexicano del año dime: ¿cuál es la diferencia entre los héroes patrios y los políticos?
––No lo se.
––En que los héroes patrios se quedaron “en” los billetes y los políticos “con” los billetes.
––Otro chistecito de esos y Fernando González Ruiz te va a crucificar en el Statbucks, centro neurálgico y de alto valor estratégico del chisme lagunero.
––Ahí te va una frase que en México escuchamos frecuentemente: “se enriqueció de la noche a la mañana”. ¿Dónde está el sujeto en esta oración?
––Ni idea.
––¡En la política! Brutus.
––No te hagas de la boca chiquita, compadre. Muchos de tus cuates son políticos.
––Por eso me gusta darles lata,
Mejor vamos a desearles salud y un excelente fin de semana.

Lluvias; agitadores afuera; la violencia en casa

Desastres naturales y acciones humanas están golpeando severamente a México y ocasionando pérdidas económicas, no solo las tormentas Ingrid Manuel, sino también los bloqueos de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, dice Enrique Irazoqui en su columna No hagas cosas buenas que se publica en El Siglo de Torreón.

La realidad es que el país está ahora escandalizado y preocupado, y en plena emergencia por las torrenciales lluvias que han azotado los dos litorales mexicanos: por el golfo de México, la tormenta Ingrid tocó tierra por la costa de Tamaulipas y Veracruz trayendo consigo torrenciales lluvias. Por el Pacífico, Manuel, el fenómeno meteorológico nombrado de esa manera, castigó a Guerrero y Oaxaca en primera instancia, causando un verdadero cataclismo en Acapulco y en decenas de comunidades de los dos estados antes nombrados, agregando también a Colima. Manuel después de golpear esa parte del territorio nacional, salió nuevamente al mar para recobrar fuerza hasta convertirse de tormenta a huracán categoría uno, que luego de una de un trayectoria errática, nuevamente se internó en territorio nacional, cerca de Los Mochis, Sinaloa, y en estos mismos instantes descarga iguales lluvias torrenciales.
La información e imágenes son realmente sorprendentes de los daños y las inmensas inundaciones que ha causado la madre naturaleza. Gran parte de Acapulco está bajo el agua y lo peor, los deslaves y desgajamientos de los cerros han obstruido vías de comunicación que han dejado aislado al bello puerto acapulqueño y a cientos de comunidades pequeñas también. El aislamiento trae consigo la carencia a la accesibilidad de víveres, por lo que con el transcurrir de las horas y los días se podría desatar una verdadera hambruna que miles y miles de mexicanos podrían padecerla. Eso es de alarma.
Antes de ello, la agenda informativa la ocupaban los trabajadores de la educación pública (no se les puede dar el apelativo de maestros, porque aquellos que sistemáticamente dejan sin clases a decenas de miles de niños por la lucha de espacios políticos, no pueden ser considerados como tales) de Oaxaca y Michoacán, agremiados a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, la CNTE, se trasladaron a la ciudad de México para intentar frenar la reforma educativa que urgentemente reclama la juventud mexicana.
Los miembros de la Coordinadora, acostumbrados al activismo político, fueron con el paso de los días radicalizándose en sus manifestaciones. Sabedores que el Distrito Federal está gobernado localmente por un gobierno perredista, pudieron en aras de su movimiento estrangular la circulación de rúas importantes de la capital, afectando a miles y miles de terceros que tienen que soportar la pasividad del gobierno de Miguel Mancera, que en su cálculo político apuesta por no controlar a unos cuantos agitadores así el costo de ello lo tengan que padecer los residentes de la capital del país que nada tienen que ver con el asunto.
La CNTE, al encontrar un gobierno de la ciudad y las propias autoridades federales con mano frágil, en un par de ocasiones bloqueó incluso el acceso al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, con el fin de causar más daños a terceros, a ver si de esa manera se salían con la suya de chantajear al Estado Mexicano.
Llegaron las fiestas patrias y el Zócalo era propiedad de la CNTE. El tradicional Grito de Independencia que encabeza el presidente de la república el 15 de septiembre con la verbena popular que ocurre justo después del ritual, y al día siguiente, el Desfile militar, redujeron el margen de maniobra. Finalmente el presidente Peña Nieto tuvo que tomar una decisión y vía la fuerza legítima del Estado, desalojó a los de la CNTE en un operativo de la Policía Federal y así las fiestas patrias de todos los mexicanos se pudieron celebrar. La efervescencia política de todo este asunto quedó en segundo término por la verdadera tragedia de las inundaciones.
Así entonces, en La Laguna como en el resto del país los ojos estaban puestos en estos dos eventos de gran calado. El tema educativo es de verdadera trascendencia en largo plazo. El paupérrimo nivel de la educación de los mexicanos es responsable en gran medida del retraso, la injusticia, falta de oportunidades que sufrimos el pueblo de México, por ello es importante el trance nacional que se vive para la aprobación de la reforma debida; en tanto, el asunto de las tormentas ha alcanzado tintes de tragedia nacional y hay que afrontarla con todo para levantarse del azote.
Pero mientras todo esto sucedía, en La Laguna hay hechos ineludibles que dejan claro que el flagelo de la atroz violencia ha vuelto por sus fueros. Ayer fue incendiado el quinto autobús de la línea roja que transita por las tres ciudades más pobladas de La Laguna: Torreón, Gómez Palacio y Lerdo. El modus operandi es un asalto al chofer de la unidad en turno. Sujetos rocían de combustible el camión y le prenden fuego. En algunos casos, sin importar lesionar con fuego al conductor a cargo.
Los primeros tres hechos de éstos sucedieron del lado de Durango, donde las autoridades saben que cuentan con un pueblo agachón, así que el gobierno de Jorge Herrera sabe que con poco puede diluir los hechos, por más graves que éstos sean. Pero esta semana, los incendios ocurren en Torreón, es decir en Coahuila, y es el turno del gobernador Rubén Moreira de afrontar la situación, de suyo lamentable.
Estos actos terroristas no son más que la muestra evidente de que el manto ominoso de la delincuencia de altos vuelos no se ha ido de la región y tendremos los de a pie que seguir viviendo con ello y suplicando no ser atacados en cualquier momento por este flagelo. Lo peor, es que Durango sabe que en Gómez Palacio y Lerdo no importa lo que pase, su gobierno y las canonjías propias del mismo no sufrirán un ápice. Y por Coahuila, tal vez Rubén Moreira pueda agregar a su discurso que "Torreón está a toda madre", que aquí también se queman a toda madre camiones.